Una diarista fue maltratada por su jefe. Esta diarista latina está buenísima. Con un culo grande, redondo y perfecto, necesita limpiar la casa y ganar algo de dinero. Su jefe es un cabrón enfermo, así que la observó con sus grandes tetas y le ofreció dinero extra si le chupaba la polla. La puta aceptó y dijo que por el doble le dejaría correrse dentro de su coño.